El verano es una estación del año maravillosa, los días son más largos, muchas personas disfrutan de un período de descanso,  los helados se convierten en el dulce especial, ¡no hay cole!.

Todavía recuerdo las tardes-noches de verano en la calle donde vivíamos, un barrio humilde de la ciudad de Alicante. Los mayores sacaban sus sillas y charlaban, en la esquina de la calle, desde el anochecer hasta que el sueño los rendía y la chiquillería de la calle jugábamos al pilla, pilla, a las chapas, al escondite entre los coches, ¡qué energía la nuestra!.

Pero como nos recuerda el refranero popular «no es oro todo lo que reluce»,  seguro que hay cosas que no nos gustan del verano y entre ellas están los temidos mosquitos.

Me pregunto, ¿ cómo se defendería mi abuela de ellos ?  Buscando información sobre repelentes de mosquitos de antaño sólo he tenido que revisar estos fabulosos libros que tengo como un tesoro en mi librería para descubrir algunas propuestas.

¡Nada más y nada menos que datan del 1942! Todo ésto y mucho más sucedió ese año.

Y fijáos qué propuestas nos hace su autor para repeler mosquitos, entre ellas el uso de eucaliptol y aceite esencial de clavo.

Pero lo curioso ha sido investigar por qué nos pican los mosquitos y he encontrado un interesante artículo donde nos cuenta que a los mosquitos les atraen tres aromas que desprendemos los humanos, el ácido láctico y el octenol que desprendemos a través de la piel y el dióxido de carbono que exhalamos al respirar y vamos que ninguna de estas sustancias podemos evitar emitirlas, por lo que vamos a ver con qué productos naturales podemos tratar de, como dicen, en el artículo, «hacernos invisibles» a los mosquitos con la mayor eficacia posible.

Mi experiencia combatiendo las picaduras de los mosquitos ya a la desesperada fue aplicando alcohol de romero, y os aseguro que nos hicimos invisibles y pudimos seguir con nuestra tarea de albañiles en casa a las 21 h de la noche en pleno verano.

Alcoholatura de romero

La elaboración del alcohol de romero es muy sencilla.

Podemos hacerla con la planta o con el aceite esencial.

Con la esencia: 5g de esencia en 95g de alcohol de 96º
Con la planta: 70 a 90 gramos de planta machacada en 250 ml de alcohol de 96º, macerando durante
1 semana y luego colado.

Os recuerdo más cosas sobre este fabulosa planta que ahora ha sido rebautizada como Salvia rosmarinifolius en este otro artículo de mi blog.

Si queréis elaborar un repelente de msoquitos a partir del alcohol de romero pero que no reseque tanto la piel os propongo esta adaptación:

70% alcohol de romero

10% de glicerina vegetal

0,5 % de aceite esencial de albahaca

0,5 % de aceite esencial de clavo

0,5% de aceite esencial de geranio

0,5 % de aceite esencial de citronela o eucalipto limón

¡Ojo, no usar en niños menores de 6 años!

Os propongo un repelente de mosquitos un poquito más elaborado pero también muy sencillo de hacer. Yo le he incorporado aceites esenciales de Ocimum basilicum o albahaca, Pelargonium graveolens o geranio malvarrosa, Lavandula angustifolia, la lavanda «hembra» que describió Dioscórides y Cymbopogum nardus o citronela. Otras combinaciones que podéis usar de aceites esenciales son: el aceite esencial de eucalipto limón o Corymbia citridora,  Eugenia cariophyla o clavo de olor y un aceite esencial muy interesante que es el de Hypericum perforatum o hierba de San Juan, que por su alta concentración en 2-methyl-octano es un eficaz repelente de mosquitos. También puede ser eficaz el aroma de la vainilla, que he de confesaros que me encanta.

Repelente de mosquitos herbáceo y natural

Ingredientes para 100

Infusión de menta 92,8

Solubilizante (polygluceryl-10 laurate, agua, ácido cítrico) 4

Aceite esencial de albahaca 0,5

Aceite esencial de geranio 0,5

Aceite esencial de lavanda 0,5

Aceite esencial de citronela o eucalipto limón 0,5

Goma xantana 0,6

Conservante 0,6

Elaboración

Realizar la infusión, filtrarla y en el agua caliente a unos 40º agregar la goma xantana para que se disperse y genere el gel.

Mezclar los aceites esenciales con el solubilizante e incorporar a la fase acuosa.

Medir el ph para comprobar que está en el rango adecuado al conservante a usar y agregar el conservante.

ph de la fórmula 6

Observaciones

Si no disponéis de solubilizante podemos sustituir la mitad (2%) por alcohol de 96º y disolver en él los aceites esenciales y sumarle el otro 2 % a la infusión de menta.

¡Ojo, no usar en niños menores de 6 años!

Otra sinergia de aceites y aromas muy interesante es la que se consigue con la mezcla de aceite esenciales de eucalipto limón  (Corymbia citridora), clavo de olor (Eugenia cariophyla) y extracto aromático de vainilla. ¡Acabo de preparar la sinergia a partes iguales y me encanta como huele! Espero que también me ayude a convertirme en «invisible» para los mosquitos.  En cuanto me llegue el aceite esencial de hipérico lo incorporaré en mi próximo repelente ¡Os lo contaré todo!

Curiosidades y descubrimientos que aparecen cuando investigas es que hay una planta, la Hierocloe odorata o Nitens anthoxanthum, conocida popularmente como «hierba dulce», o «hierba vainilla», que por su alto contenido en cumarina puede ser un eficaz repelente de mosquitos. Es considerada una hierba sagrada por los pueblos indígenas de Canadá y EEUU. En este artículo tenéis más información de lo que se ha descubierto de esta planta, pincha aquí.

¡Ah, por cierto ! Este es el aspecto de la Citronela o Cymbopogom citratus del Ecojardín de Corazón Verde, nada que ver por supuesto con los geranios a los que en los centros de jardinería se les llama «citronela», como os suelo decir, es muy importante conocer el nombre en latín de las planas y muy enriquecedor conocer los nombres comunes o populares con las que se les denomina por diversos pueblos y lugares.